Valdeteja

Valdeteja es un tranquilo pueblo de la montaña leonesa, enclavado al este de Valverdín y con acceso también desde la vecina Vecilla de Curueño. Es por este punto donde se levantan las hoces de Valdeteja y Nocedo, hermanas orientales de las más famosas Hoces de Vegacervera. En las que aquí nos ocupan, también hay alguna que otra vía de escalada, aunque es bastante más complicado encontrar información sobre ellas.

El pueblo de Valdeteja está al Norte de las Hoces, y entre los Picos Correcillas y Bodón. Al este del pueblo se levantan las lastras del Mediodía (parte del Pico Cobella), de una caliza espectacular, y donde en los últimos años se han abierto varias vías de escalada que bien merecen una visita. Entre ellas, están las dedicadas al difunto Marcos Cedrón y a pablo Cedrón. A su izquierda, cruzan dos vías más, “Lucha Leonesa” de Marta García y Tino Núñez, así como “Desafío Calleja en Valdeteja” de Juan Carlos Mallebrera y Pedro Salgado. Estas dos son de grado superior, con pasos de 6a y 6b respectivamente.

La escalada no se puede catalogar como continua. El primer largo no es obligatorio, pudiendo subir por la canal de descenso sin problemas, y en él hay múltiples variantes entre el IV+ y el V+. Después, un pesado tramo de 100 metros caminando interrumpe la escalada, para volver a retomarla bajo el torreón final. No hay equipamiento en las vías, y se puede escalar por numerosas variantes, así que se requiere intuición y saber navegar en la pared, que por cierto es bastante tumbada y poco espectacular. Sin embargo, la excepcional calidad de la roca, la tranquilidad del entorno, la variedad de pasos a afrontar y la posibilidad de marcar todas las variantes que queramos compensa de sobras estas desventajas.

Como material a llevar, es necesario un buen juego de fisureros, cordinos para los numerosos puentes de roca que encontraremos y descensores, ya que al menos afrontaremos un corto rápel para el descenso. Las vías tienen una longitud superior a los 200 metros, sin contar el tramo caminando entre la parte baja y la superior.

Para llegar a la pared, salimos del pueblo junto al bar, por un sendero que nos hace cruzar el reguero por un precario puente y doblar a la izquierda (norte) para ir pasando bajo las paredes de la montaña (incluso veremos algunos parabolts por esta zona) Ascendiendo lentamente, nos encaminamos a la canal que corta la montaña por su mitad, en unos 20-30 minutos desde el coche. Hay algunos jitos al llegar a la canal que nos indican que vamos bien. A nuestra izquierda, la pared marca el inicio de la escalada.

Podemos tomar múltiples variantes en este largo. La nuestra la hicimos bastante a la derecha, casi sobre la canal de descenso, para evitar la maleza que crece en esta parte. Sale con algún paso de IV+, una longitud de 45 ó 50 metros y es bastante sencilla de asegurar. En la parte alta, aprovechando los numerosos puentes de roca, podemos montar una buena reunión. Ahora seguimos por la canal, caminando unos cinco minutos por su parte izquierda, hasta encontrar un rellano con una curiosa roca, adosada a la parte baja de la pared, que recuerda a las famosas estatuas de la Isla de Pascua.

Esta roca nos marca el inicio de la vía Marcos Cedrón, que va por su izquierda atravesando los canalizos. Unos metros más arriba, veremos una chapa y tras superar este tramo, montamos la primera reunión. La siguiente tirada va a buscar una buena terraza arriba, un poco a la izquierda, y para la cuarta nos acercamos al mogote cimero, pasando por debajo de él hacia la derecha, esquivando lo más complicado y vertical. Todos estos largos rondan los 50 metros, y están completamente limpios, incluyendo las reuniones, que se pueden montar fácilmente aprovechando las facilidades que nos da la roca. La última tirada va por la derecha del mogote, hasta salir a una terraza donde, al fondo, derecha, veremos el descuelgue del rápel (espit y clavo) Por aquí podemos bajar; son pocos metros, no llegan a 20, y seguimos bajando por la canal, ancha y pedregosa, hasta abajo del todo, donde podemos destrepar (pasos de III+) o volver a rapelar (un rápel algo escondido a base de puentes de roca con maillón, unos 30 metros hasta el inicio)

La vía gemela Pablo Cedrón, sale por los canalizos a la derecha (pasos de V-) para montar reunión en alguna pequeña terraza. El segundo largo va directamente a buscar un resalte, que pasamos por el medio (V) y montando reunión poco después. La tercera tirada sigue de frente, hacia el mogote cimero, con pasos de fisura, canalizos (V-), hasta una serie de árboles donde haremos reunión, coincidiendo ya  con la vía de la izquierda. Desde la pequeña terraza donde hacemos reunión, hay varias variantes, siendo la más difícil el superar una fisura vertical en bavaresa (V) y hacer una fácil travesía bajo la roca final para acabar cerca del tinglado de rápel. El descenso es el mismo que el de la vía anterior.

Si queréis más información, tenéis fotos y comentarios de los aperturistas en el Foro de Picos de Europa. Sólo os queda ya disfrutar de la espectacular roca de Valdeteja. Suerte y un saludo del Maquis